martes, 12 de julio de 2011

Cambiar



¿Podemos cambiar realmente?
Esta pregunta representa el abismo al que nos enfrentamos al menos una vez en la vida y hasta que no nos convencemos de que es posible hacer un cambio real, nuestras vidas son poco más que soñar despiertos.
Cuando nos planteamos cambiar el miedo hace que nos imaginemos un abismo, pero éste no es más real que la pesadilla de un niño.
Ser conscientes del poder de nuestros pensamientos y sentimientos para progresa puede abrirnos los ojos y hacernos ver que lo que tenemos delante no es un abismo sino un sendero.
La respuesta está en dar el primer paso.

viernes, 8 de julio de 2011

Cambia



Cambia, pero empieza despacio, pues la dirección es más importante que la velocidad. Siéntate en otra silla, al otro lado de la mesa. Más tarde, cambia de mesa.Cuando salgas a la calle, ve por la otra acera. Después, cambia de ruta, camina con calma por otras calles, observando con atención los lugares por donde pasas. Coge otros autobuses. Por un tiempo, cambia tu forma de vestir; regala los zapatos viejos e intenta andar descalzo unos días, aunque sea en casa. Tómate una tarde entera para pasear libremente, oír el canto de los pájaros o el ruido de los coches.Abre y cierra cajones y puertas con la mano izquierda. Duerme en el otro lado de la cama. Después, duerme en otras camas. Ve otros programas de televisión, lee otros libros, vive otros romances, aunque sea en tu imaginación.Acuéstate más tarde. Acuéstate más temprano. Aprende una palabra nueva al día. Come un poco menos, come un poco más, come diferente; escoge nuevos condimentos, nuevos colores, cosas que nunca te atreviste a probar.Almuerza en otros sitios, ve a otros restaurantes, toma otro tipo de bebida, compra el pan en otra panadería. Almuerza más temprano, cena más tarde, o viceversa.Busca lo nuevo todo el día: el lado nuevo, el método nuevo, el sabor nuevo, el gesto nuevo, el placer nuevo, la postura nueva. Escoge otro mercado, otra marca de jabón, otra pasta de dientes. Báñate a otras horas.Utiliza bolígrafos de otros colores. Ve a pasear a otros lugares. Ama cada vez más, de diferentes formas. Cambia de bolso, de cartera, de maleta, cómprate otras gafas, escribe nuevos poemas. Abre una cuenta en otro banco. Ve a otros cines, a otros peluqueros, a otros teatros, visita otros museos.Cambia. Y piensa seriamente en conseguir un nuevo empleo, una nueva ocupación, un trabajo más parecido a lo que esperas de la vida, más digno, más humano.Si no encuentras razones para ser libre, invéntalas: sé creativo y aprovecha para emprender un viaje sin pretensiones, sencillo, largo y, a ser posible, sin destino. Experimenta cosas nuevas. Vuelve a cambiar. Prueba de nuevo. Experimenta otra vez. Sin duda conocerás cosas mejores y cosas peores que las que ya conoces, pero no es eso lo que importa. Lo más importante es el cambio, el movimiento, el dinamismo, la energía. Sólo lo que está muerto no cambia, y tú estás vivo.









Paulo Coelho.